(Por Ciudad Noticias): En menos de un mes se cumplirán dos años de la puesta en marcha de la más ruin campaña del poder político de turno y un rejunte de funcionales a cambio de dádivas, promesas y retornos para anular en año electoral a la única voz crítica. Era crucial para los intereses de campaña callar a Pablo Peralta, exdirector de Ciudad Noticias (CN) y de Frecuencia Zero. Con una inexistencia de delito, los tiempos judiciales son lentos, pero la convicción de la verdad ha salido a la luz.
El comunicador saavedrense regresará antes de lo previsto –justamente- donde habrá que votar.
CN ha modificado su logo luego de varios años. La marca insignia que caracteriza al medio, con una clara tendencia como esa flecha apuntando hacia el cielo: al infinito, sin límite y en permanente crecimiento. Logrando instalarse entre los medios más leídos de la región, con un insoslayable trabajo en redes sociales (casi 200 mil seguidores en Instagram).
Pablo Peralta, ha estado en desventaja desde que se mancilló su buen nombre, con una campaña que si bien ha sido la más sanguinaria de la historia de la democracia en el partido de Saavedra desde el regreso de la misma, no fue la única. Y el periodista estoicamente ha sostenido su rumbo de seguir con la verdad e informando. Sin pautas publicitarias del estado, sea nacional, provincial o municipal. No olvidar las intentonas de clausura de la radio.
Lo que se viene
Su regreso está próximo a concretarse, en un escenario que promete ser intenso porque nuevamente los argentinos vamos a las urnas, donde el fomentista Raúl Isidro anunció su finalización de mandato al frente de la entidad madre, a partir de abril, para dedicarse a la campaña. Quiere ser concejal de la mano de;
Guillermo Moreno. Un gran round promete los comicios de medio término: Isidro postulándose y Peralta con micrófono abierto.
Hay una cualidad que vale más que una publicidad o dinero en un sobre: Peralta supo elegir entre el servilismo y la dignidad.
Los cómplices con micrófono
Tiempo atrás, apareció en la localidad un emisario (G.C) del mandamás, con aire de superación y montó una radio- la misma- que se encargó de solventar el varias veces senador e intendente. El objetivo era instalar la única verdad. Obviamente, la gente no come vidrios.
Ese mismo individuo que se encargó de movilizar a los soldaditos para el escrache, el que no descansaba etiquetando a medios nacionales la mentira del delito, para “nacionalizar” el “horror” que nunca fue. El que se enojaba cuando descreídos sabían que era una mentira y los tildaba der “ser los mismos que Peralta”.
Un expresidiario (B.V) con condena cumplida por comercialización de estupefacientes- narcotráfico- queriendo dar clases de moralidad y ética, subido en el tren de la mentira, también fue parte de la operación.
Ambos y otros medios, han mantenido la complicidad con el silencio de no contar nada sobre el revés judicial que afronta en cada instancia el mentor Diego Marezi.
Durante mes y medio, dedicaron horas de programas o espacios para embarrar a Peralta. Cuando el panorama se aclaró, ninguno se encargó de informar a la comunidad.
Tendrán que hacerlo tarde o temprano.
El desprestigio salvaje que pergeñó el gobierno de Hugo Corvatta con su brazo ejecutor- y por entonces secretario de gobierno Marezi, contó con la complicidad de un puñado de cipayos que a cambio de promesas, mercadería, dinero, y otras dádivas, optaron por sumarse a la escandalosa escena frente al domicilio del padre del exdirector de CN, sabiendo que Peralta ya no se hallaba en el inmueble.
Son esos que eligieron el servilismo los que tendrán que contestar en la justicia civil y penal. Los que ahora están preocupados, y desean que la feria judicial sea eterna, para que una vez que se reanude la actividad en tribunales, no se libre el sobreseimiento definitivo al trabajador de prensa local.
Son los mismos que han buscado la manera de borrar con el codo lo que escribieron con la mano.
Los que pintaron, los que pegaron papeles, los que cantaron, gritaron, los que se dejaron arriar por el solo hecho que Peralta en sus respectivos programas, criticó o sacó a luz algún que otro chanchullo.
La frente y la copa en alto
Hay una única posibilidad en este largo peregrinar: la justicia rechazó todo intento de embarrar la cancha de parte del aprendiz de abogado Marezi, no hay una prueba que demuestre comisión de delito alguno. Los que esperan la caída de Peralta, tienen que saber que no pasará y el “operativo champagne” tendrá un solo partícipe con la copa en manos y ya saben quién es.
El exdirector de CN, ha recibido múltiples muestras de afecto y apoyo en este tiempo, de los mismos que lo han sostenido y mantienen permanente contacto: uno de ellos, transmitió a la redacción que es tanto el “julepe” que sienten los serviles, que no quieren ni ver una calcomanía de Pablo Peralta en el pueblo.
Habrá tiempo para poner cada cosa en su lugar. Sin sed de venganza, la convicción del damnificado, en lo terrenal es que desfilen a rendir cuentas a los juzgados y Dios hará el resto de las cosas.
Es oportuno en tiempo de vacaciones y de ocio releer esta nota de colección publicada por Ciudad Noticias sobre el rol cómplice de la prensa:
https://ciudadnoticias.com/lo-que-deja-la-causa-armada-periodismo-mercenario-y-en-decadencia/