Durante la pandemia, la pareja transita roces propios de la convivencia y las diferencias serían irreconciliables
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro, porque ahora transitan una fuerte crisis debido a sus abultadas agendas y la imposibilidad de hacer coincidir los horarios. Mientras ella cuida de los niños, se ocupa de las necesidades de la casa y estudia Leyes, él está inmerso en la producción de su próximo material discográfico.
Ante las diferencias irreconciliables, las personas que integran esta pareja decidieron permanecer bajo el mismo techo pero en diferentes áreas de su mansión que incluye hasta dos departamentos para no cruzarse en demasía.
Además, allegados al matrimonio expresaron en la última edición de Us Weekly: Ella siente como si Kanye hubiera estado tratando de imponer sus puntos de vista sobre su vida. Kim siente que necesita algo de espacio de Kanye».