No es la primera vez que el empresario Carlos Carlaván Goñi, detenido ayer tras un choque en el barrio Patagonia, protagoniza un hecho de tránsito de características violentas.
En 2008 fue acusado de atropellar a productores rurales de Tornquist que realizaban un piquete en la ruta 33 y de provocarle heridas de gravedad a uno de ellos.
Aquel hecho, llamativamente, todavía no tiene resolución judicial, por distintos planteos dilatorios de sus abogados y demoras en las respuestas judiciales.
La causa está a cargo del Tribunal en lo Criminal N° 2 de Bahía y el juicio oral tendrá lugar los días 14 y 15 de febrero del año que viene.
Hubo notables demoras en el proceso porque más de una vez sus abogados pidieron la suspensión de juicio a prueba (probation), medida que fue negada sucesivamente por la Cámara Penal de nuestra ciudad, aunque siempre recurrieron a Casación.
En ese caso Carlaván está acusado del intento de homicidio del veterinario Rubén Braun.
Fue el domingo 15 de junio de 2008, por la tarde, cuando el dueño de una droguería regresaba a Bahía desde la zona serrana, en una camioneta, y se topó con un piquete de productores en la ruta 33, a la altura del acceso a Tornquist.
El empresario, al parecer, decidió seguir su marcha e impactó a Braun, quien terminó con golpes de consideración y fue hospitalizado, aunque pudo recuperarse.
“Cuando llegué al lugar, detuve la camioneta, pero ellos me rodearon y empezaron a golpearla. Venía con mis hijos y temí por ellos. Además, la nena se puso a llorar y me asusté. Al ver que no había nadie delante de mi camioneta, arranqué y me fui. Cuando llegué a la policía caminera me di cuenta de que podía haber golpeado a alguien con los espejos porque estaban para adentro”, declaró en ese momento Carlaván Goñi.
Braun, en cambio, dijo que «cuando uno pasa habitualmente por un cruce, aminora la marcha; y si encima hay un montón de gente y la Policía coloca conos de seguridad, no podés pasar a alta velocidad. La persona que me atropelló, sin embargo, no se detuvo ni siquiera para auxiliarme, y continuó su camino por la ruta, escapando también de la persecución de la Policía».
«Cuando te pones a pensar en lo que hubiese podido suceder ese día, en el acceso a Tornquist, donde estábamos nucleados alrededor de 300 productores… Lo único que pedíamos a los conductores era que aminoraran la marcha. No se estaba bloqueando la ruta», afirmó.
Por el hecho de ayer, que se produjo al chocar el paredón de una casa en Caleu Caleu y Chequén, fue arrestado por amenazas calificadas, desobediencia y resistencia a la autoridad.
Según se informó desde la comisaría Primera, cuando una vecina se acercó para tratar de auxiliarlo, el hombre se negó a bajar y le apuntó con un arma.
La Policía secuestró en el habitáculo de la Ram una pistola de aire comprimido.
FUENTE: LN