En noviembre de 2019 el comisario inspector Gabriel Miguel Zamora (50) fue separado de su cargo como responsable de la Delegación de Inteligencia Criminal Bahía Blanca de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, luego de que tres mujeres que trabajaban bajo sus órdenes lo denunciaran por abuso sexual.
Las víctimas lograron dejar atrás sus temores y dijeron basta a la situación de sometimiento y maltrato que venían sufriendo por parte del superior.
La investigación, iniciada unos meses antes de su apartamiento, avanzó y en febrero de 2021 fue detenido por orden de la Justicia de Garantías.
En las últimas horas, a partir de la realización de un debate abreviado, el juez del Tribunal en lo Criminal Nº 1, Hugo Adrián de Rosa, condenó a Zamora a 6 años y medio de prisión.
Previamente, la fiscal Marina Lara y el defensor oficial Sebastián Cuevas, con la aceptación del imputado, habían acordado la calificación legal y la sanción para el exuniformado.
Para el magistrado se acreditó que uno de los hechos ocurrió a mediados de 2018, en las dependencias ocupadas por el área que dirigía Zamora, en la parte trasera del edificio de la Jefatura Departamental de Policía, ubicado en avenida Alem al 800.
En esas circunstancias, y aprovechándose de su jerarquía superior, manoseó en dos oportunidades a una oficial a su cargo.
Los otros episodios imputados se produjeron, de acuerdo a la denuncia, entre mayo de 2013 y octubre de 2014, en la misma dependencia, en una oficina policial de Tres Arroyos y en el interior de un vehículo durante un viaje a esa ciudad.
El tercer hecho ocurrió en 2014, también en la sede de Alem, cuando manoseó a otra oficial.
El juez indica en el fallo que «considero que los hechos endilgados por el Ministerio Público Fiscal se encuentran sobradamente acreditados y que autor de los mismos resulta ser Gabriel Miguel Zamora».
Agrega que «en primer lugar, ha de destacarse que Zamora intentó colocarse en una situación procesal beneficiosa, con argumentos ajenos a los hechos, tratando de desacreditar a las víctimas, lo cual ha sido contrarrestado con la prueba colectada por la fiscal».
Finalmente también resalto que psicólogos que entrevistaron a las mujeres «descartaron cualquier tipo de fabulación en los relatos, así como que hayan sufrido presiones externas o animosidad previa hacia el causante.».
FUENTE: LA NUEVA